El alcalde de Licantén, Marcelo Fernández Vilos, se reunió con los gerentes de Banco Estado, con el fin de continuar con las gestiones que el municipio ha desarrollado para que la zona costera de Iloca, vuelva a contar con un cajero automático.
La cita del jefe comunal, que incluyó al subgerente de municipalidades, Matías Barros Silva y el jefe del grupo de gerencia general de créditos, Stefan Tuemmers Apablaza, pretendió dar forma a la propuesta que deberá revisar la entidad bancaria.
Al respecto, Barros aclaró que anteriormente, el servicio en el balneario fue instalado a través de un convenio entre el Ministerio del Interior y Carabineros de Chile. Debido al incremento de robos existentes en esa época en todo el país, se determinó que se extendiera por 6 meses, lo que terminó siendo tres años.
Posteriormente, una vez que cesó el trato a nivel nacional, se procedió al retiro del dispensador, con lo que tanto los pobladores como los turistas quedaron sin la posibilidad de sacar dinero.
“Es importante señalar, para tranquilidad de los habitantes, que iniciamos un proceso de negociaciones para reevaluar la reposición del servicio. Tenemos la mejor de las relaciones con el municipio, compartimos responsabilidades en común y por eso, queremos aumentar y promover el desarrollo de la comuna”, indicó el subgerente.
Por su parte, el alcalde Fernández enfatizó las acciones que se han estado gestionando con la finalidad de establecer un convenio directo entre el municipio y Banco Estado. Asimismo, aclaró que “la municipalidad no tuvo nada que ver en la instalación ni el retiro del cajero que estaba en el retén”.
“Estamos iniciando este proceso ya más formal, en base a conversaciones que habíamos tenido antes de la primera instalación del cajero en Iloca. Ahora, las estamos retomando para volver a contar con el servicio. Somos instituciones que estamos al servicio de la comunidad, nos entendemos y estamos vinculados, para ir en ayuda de nuestros residentes y veraneantes”, agregó el jefe comunal.