El 4 de noviembre de 1970 no fue un día común para Leoncio Ruperto Saavedra Concha. Aquella jornada, el joven radical de 34 años comenzaba un nuevo desafío asignado por el recién elegido presidente de Chile, Salvador Allende Gossens.
Anteriormente, Saavedra había sido profesor en la Escuela Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (ubicada en la Avenida Colón), carrera que lo involucró en la dirigencia de la Federación de Educadores de Chile y posteriormente en la Asociación de Municipalidades, cargos en los cuales se ganó el respeto y el cariño de la ciudadanía, vocación política a la cual le ha dedicado más de medio siglo de existencia.
Pero volvamos a 1970, porque ese 4 de noviembre fue un día inusual y su carrera había dado un giro importante, aún así quiso dejar de lado ciertos privilegios, cómo por ejemplo, prefirió no utilizar un automóvil asignado para intendentes (en esos tiempo era muy difícil tener uno). Él prefería caminar y lo hacia desde el cité ubicado en calle Peña, entre Prat y Merced, lugar donde vivía en la ciudad.
Con la llegada de la junta militar al poder por la vía armada y la persecución a toda la alianza política de la Unidad Popular, Saavedra tomó la decisión de exiliarse en el extranjero, un largo periplo que duró 15 años y que tuvo como destino Bélgica, Cuba y Argentina, en este último sufrió golpes y vejámenes por parte de agentes de la Dina cuando intentaba regresar hacia Chile con la “Avanzada del Exilio”. “Lo vi en Mendoza una vez. Se me acercó y me dijo que era de Curicó. La verdad es que fueron agredidos en varias oportunidades por los militares. En esa ocasión, le dejé algunas cosas para que estuviesen mejor”, recuerda el periodista local Luis Rivera.
A su regreso en 1988, Leoncio Saavedra continuó su carrera política, siendo regidor, concejal y llegando a ser candidato al parlamento.
Le faltó ser alcalde, quizás, esta es una deuda pendiente en su extensa y larga trayectoria como servidor público de más de 50 años.
En la actualidad continúa ejerciendo como concejal en Curicó y en el 2020, anunció su salida al Partido Radical, donde fue una de sus figuras emblemáticas.